Debido al desarrollo caótico, las aves disponen de menos lugares para vivir, y es imprescindible reconquistar estos espacios, por pequeños que sean, sobre todo en las áreas urbanas.
Como todos los años, BirdsCaribbean, la sociedad de conservación más grande del Caribe insular, antigua “Sociedad para la Conservación y el Estudio de las Aves del Caribe”, organiza en la región el “Festival de las Aves Endémicas del Caribe”. Cada año más países se suman a la fiesta y se realizan un montón de actividades desde charlas y recorridos observando aves hasta concursos de pintura y fotografía. El lema de este año (“Restaura el hábitat, Restaura las Aves”) no podía ser más oportuno, ya que cada vez, debido al desarrollo caótico, las aves disponen de menos lugares para vivir y es imprescindible reconquistar estos espacios, por pequeños que sean, sobre todo en las áreas urbanas. Si aceptamos el hecho de que el crecimiento urbano es indetenible, tenemos que manejar las áreas urbanas como lo que son: ecosistemas, especialmente en ecosistemas insulares como los nuestros, poco extensos y frágiles.
Como cada vez hay más cemento y menos monte, sólo si habilitamos los espacios que nos van dejando las construcciones, lograremos que algunas especies sobrevivan. Y para esto cualquier rinconcito vale. Es relativamente fácil ayudar a las aves, los lagartos y los insectos. Si no tenemos patio con tierra (Como es mi caso), podemos sembrar arbustos y bejucos (enredaderas) en tarros o envases.
Muchas de las plantas exóticas (extranjeras) que usamos como ornamentales en nuestros jardines, son plantas “ecológicamente muertas”, pues por haber evolucionado en países con ecosistemas diferentes, interactúan muy poco con la fauna autóctona. Si sembráramos plantas nativas, muchas de las cuales son más hermosas y más resistentes que las foráneas, tendríamos jardines más saludables e interactivos al tiempo que contribuiríamos a la conservación de la biodiversidad.
A continuación algunas de las sugerencias del Comité organizador del Festival para este año: Comparte la importancia del hábitat con los participantes. Educa sobre los hábitats en tu área y en tu comunidad.
• Conoce las aves que viven en diversos hábitats durante el evento.
• Involucra al público en un proyecto de restauración en tu área o comunidad.
• Siembra árboles nativos que proveen alimento (néctar, frutas o semillas) para aves en tu escuela, parques, hogar o negocio.
• Desarrolla una lista de plantas nativas que beneficie a las aves y comparte la lista con miembros de tu comunidad; pídeles que escojan árboles nativos en vez de exóticos.
Un menú ciertamente atractivo el que nos ofrece el comité organizador del Festival, pero los conservacionistas del país (y muchos colegas internacionales) creemos nuestro deber aprovechar el Festival de Aves Endémicas para mostrar la tragedia que vive el Parque Nacional Sierra de Bahoruco, el ecosistema más importante para las aves endémicas de nuestra isla, donde pueden verse 29 del total de 31, y que es en la actualidad víctima de una espantosa conspiración de exterminio. La Sierra de Bahoruco es un bosque primario y como tal, irrecuperable. Tenemos que entender, como destacara un editorial de Diario Libre, que impedir la deforestación es más importante que reforestar. Escribiremos varios artículos sobre el tema del Festival, el cual dedicamos al “Parque Nacional Sierra de Bahoruco”. El Senador romano Catón el Viejo terminaba siempre sus discursos con la frase “Es necesario destruir a Cartago”, esa próspera colonia fenicia. Proclamemos, parafraseando a Catón: ¡Hay que salvar la Sierra de Bahoruco!
Por: Simón Guerrero
Vía: Diario Libre