El informe señala que la causa del frío de principios de verano podría deberse a las condiciones en el suroeste de Canadá y el noroeste de Estados Unidos, ya que en ambos territorios se formó un enorme sistema de alta presión de “bloqueo”.

Agrega que ese patrón ocurre regularmente en la tropósfera, y no sólo en América del Norte, pero que nunca se había observado con tanta fuerza.

El estudio cita un análisis realizado por la iniciativa científica internacional World Weather Attribution que demostró que ese sistema de alta presión sólo podía entenderse como resultado del calentamiento atmosférico causado por la actividad humana.

2021, un año notable

El nuevo informe afirma que 2021 fue un año notable por varias razones.

La primera fue que por primera vez registró lluvia en la estación meteorológica Summit, localizada en lo alto de un glaciar a 3200 metros de altitud.

Además, supuso una aceleración de la pérdida de hielo en el glaciar Sermeq Kujalleq, donde la tasa de pérdida se había estancado durante varios años.

Por otra parte, el Portal Polar reporta que las nevadas invernales estuvieron cerca del promedio para el periodo comprendido entre 1981 y 2010 y precisa que es una buena noticia porque la combinación de pocas nevadas invernales y un verano cálido puede provocar grandes pérdidas de hielo, como sucedió en 2019.