Altagracia Guzmán informó que en la zona afectada se hicieron las investigaciones de lugar en busca de posibles lesiones, y que la recurrencia de pacientes a consulta en el hospital municipal de San Antonio de Guerra se mantuvo normal.
Los resultados de la investigación no arrojaron casos de contaminación severa en seres humanos de la sustancia recogida el pasado viernes por Salud Pública y Medio Ambiente.
El polvo tóxico, conocido como tiosulfato de sodio, se tiró en el lugar de manera clandestina y duró más de un mes en esa comunidad.
El tiosulfato de sodio es un elemento dañino para la salud y el medio ambiente. Este mismo fue esparcido en comunidades de San Isidro y Guerra, provocando a los moradores náuseas, irritación en la piel, problemas respiratorios, además de dañar la vegetación de la zona.